DIY ambientador navideño: Regalo de navidad manual

Hola a todos!

Como os anticipaba por twitter, esta noche toca entrada navideña! Si eres fanática de los cuellos como yo (tranquilas, más cuellos de momento no) seguro que tienes algunas camisas mutiladas a las que les falta el cuello por ahí. Y si no, seguro que tienes alguna camisa vieja que se haya amarilleado un poco por el roce. Pero cualquier otro tipo de tela vale: un pañuelo, un retal... pero mejor que sea tela más bien fina. Hoy vamos a transformar, con unos pocos ingredientes, nuestra camisa en un bonito y navideño ambientador para el armario. Ojo porque voy a reciclar muuuuchas cosas que tenía por ahí:

Materiales: 

-Una camisa vieja en mi caso o cualquier retal de tela más bien fina a tu elección.
-Lazo
-Trozo de cartón o periódico para desechar
-Rotulador para ropa y plancha (si quieres que el ambientador se pueda lavar en un momento dado) o pintura acrílica o rotuladores normales (si avisas al regalado de que no puede lavar su ambientador)
-Tijeras, aguja e hilo que pegue con la tela
-Literalmente cualquier cosa olorosa para el relleno: canela, cáscara de naranja o limón, romero, tomillo o lavanda, un pañuelo impregnado en aceites esenciales...

Vamos a ver los pasos: 

1) Cortamos un rectángulo más bien largo de la tela. Mis tijeras están poco afiladas y esto es lo mejor que conseguí hacer, afortunadamente no importa que quede un poco torcido o chuchurrío.

2) Ahora ha llegado el momento de coser ¡horror! Dobla el rectángulo por la mitad, de manera que te quedes con un rectángulo más pequeño. Cose los lados más largos, dejando un lado abierto y otro cerrado por el doblez. Cose lo más en línea recta que puedas, cosa que harás mejor que yo, probablemente.

3) Ahora le damos la vuelta al invento y tendremos algo con un aspecto mucho más apetecible. Es el momento de insertar el cartón o varias capas de papel de periódico o en sucio dentro de nuestra bolsita. Hacemos esto para que la pintura no traspase ¡no escatimes en papel!

4) Ahora lo divertido! Pintamos los motivos navideños que queramos en nuestra bolsita. En este caso yo he optado por dibujar dos copos de nieve. Yo he usado el rotulador para ropa, por lo que luego le di un buen planchado, pero, como ya dije, puedes usar pintura o rotulador normal siempre y cuando la bolsita no se vaya a lavar! Recuerda no acercarte demasiado con los motivos a la apertura superior.

5) Ahora toca sentirte un alquimista y hacer el relleno! Te suena este extraño polvo blanco de algo? Si la respuesta es sí deberías dejar la droga, eres un genio ¿Os acordáis del desodorante en pastilla al que sólo daba dos de diez en mi último Haul de LUSH? No servía como desodorante, pero la verdad es que olía de maravilla, muy fresco y limpio a cítricos y limoncillo, perfecto para la ropa interior (¿?). El caso es lo machaqué literalmente con el mortero hasta que conseguí un polvo más o menos fino y más o menos uniforme y lo metí a cucharadas dentro de mi bolsita de camisa ¿Inesperado? Puede. Pero muy efectivo. Si eres una persona normal que se compra desodorantes normales y que no quiere meterlos en el mortero, puedes utilizar cualquier otra cosa aromática que se te ocurra (mira en "materiales" para más ideas).

6) Ya por fin colocamos nuestro lazo navideño. Yo aseguré que estuviera bien cerrado con una goma elástica, y luego la camuflé debajo del lazo rojo. Seguro que hay alguna manera menos cutre de hacer esto cosiendo, pero yo soy así. (Como podéis ver, tiene un trocito de cartulina roja donde ponía 15. Era el regalo del día 15 del calendario de adviento que le hice a mi chico!)

Y voilá! Este es el resultado, bonico y oloroso, se puede pedir más? Yo pienso hacer más con los girones de camisa que aún me quedan y repartirlos por la familia estas fiestas porque ¿a quién no le gusta una ropa interior fragante?

¿Os animáis con este proyecto? ¿Os gusta tener ambientadores en vuestra ropa?

Con braguitas perfumadas (eso es más información de la que seguramente os interesaba),